Mi llegada a este mundo a un hogar lleno de amor, valores y principios ha sido el inicio de una vida maravillosa. Tengo muchos recuerdos de mis padres cuando tenían que irse a trabajar mientras mis hermanos cuidaban de mí, ya que soy la menor de 3 hermanos.
La vida no era fácil económicamente, pero siempre hubo ayuda mutua entre nosotros, mientras mis padres hacían su máximo esfuerzo para darnos lo necesario, mis hermanos y yo cumplíamos con nuestros deberes y dábamos todo para que ellos estuvieran tranquilos y orgullosos de los hijos que estaban criando, y así fue.
Con sus esfuerzos diarios lograron sacarnos adelante y darnos todo lo posible para que fuéramos unos grandes profesionales, pero sobre todo unas grandes personas, nos enseñaron a ser responsables, respetuosos, leales, a hacer todo con amor, a tener empatía con los demás y afrontar cualquier adversidad con la mayor serenidad posible.
A lo largo de mi vida profesional, he desarrollado mis capacidades en diversos ámbitos laborales, soy fiel creyente que hay que aprender de todo un poquito para así poder ir fortaleciendo y diversificando nuestras habilidades y conocimientos, aportando toda la experiencia en cualquier lugar en el que me encuentre. Ingresar a Mercy Corps ha sido una de las oportunidades más lindas que la vida me ha regalado, no solamente por la labor que desarrollo en mi trabajo si no por todo lo que hacemos constantemente por las comunidades, me siento completamente identificada con todo los valores que desde mi hogar me inculcaron: la empatía, el respeto, la colaboración y sobre todo el amor por lo que hacemos, simplemente me hace sentir como en casa, siendo feliz día a día y desarrollando cada labor con el mayor gusto del mundo, porque sé que todos trabajamos por un mismo fin, porque sé que todos buscamos lo mismo y es poder ayudar a quienes más lo necesitan y todo esto ha hecho que me sienta plena y motivada con mi desarrollo aquí.
Admiro el gran equipo que somos, todos los días aprendo algo nuevo, todos los días hay nuevos retos, pero también hay ganas de sobra de alcanzar lo que todos/as anhelamos al ingresar a esta organización, un lugar mejor, y para eso seguiremos luchando y apostando todo para conseguirlo. Estoy 100% segura que seguiré dando lo mejor de mi para alcanzar todo lo que soñé y propuse desde niña: ser una gran mujer, ser una gran profesional, seguir aportando a la sociedad y que mi familia se sienta orgullosa de la gran labor que hicieron y lograron en mí, gracias a ellos estoy donde estoy y soy quien soy y tengo la certeza que en el área de operaciones donde me encuentro he podido demostrar y aportar todo lo que he venido aprendiendo en mi trayectoria y agradezco enormemente la confianza que me han brindado en este tiempo. Espero poder seguir creciendo y retroalimentando todos los conocimientos y experiencias vividas en este hermoso lugar que me ha recibido con los brazos abiertos.